Una mujer llegó a su casa y le dijo al marido:
- ¿Te acuerdas de esas jaquecas que me daban cada vez que íbamos a hacer el amor? Ya me mejoré!!!
- Cómo, ¿ya no tienes más dolor de cabeza!!!? el marido le preguntó.
La esposa le respondió:
- Mi amiga Mary me indicó un terapeuta que me hipnotizó. El médico me pidió que me parase frente a un espejo y repitiera para mí misma:
No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza
Bueno hice eso, y mi dolor de cabeza desapareció.
El marido todo maravillado le respondió:
- ¡¡¡Qué maravilla!!! ¡Esto es fabuloso!.
- ¿Te acuerdas de esas jaquecas que me daban cada vez que íbamos a hacer el amor? Ya me mejoré!!!
- Cómo, ¿ya no tienes más dolor de cabeza!!!? el marido le preguntó.
La esposa le respondió:
- Mi amiga Mary me indicó un terapeuta que me hipnotizó. El médico me pidió que me parase frente a un espejo y repitiera para mí misma:
No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza No tengo más dolor de cabeza
Bueno hice eso, y mi dolor de cabeza desapareció.
El marido todo maravillado le respondió:
- ¡¡¡Qué maravilla!!! ¡Esto es fabuloso!.